La gingivitis es la inflamación de las encías a causa del crecimiento de bacterias por la acumulación de sarro, placa dental o por una mala higiene bucodental. Es una enfermedad periodontal muy común y puede generar la destrucción del tejido conectivo de la boca, caída de dientes y ser causa de enfermedades más graves cuando no se trata y cura a tiempo. Y esto hace que sea necesario para la gingivitis tratamiento guiado por un odontólogo.
Síntomas cuando tienes gingivitis
Algunas personas tienes cierta predisposición para sufrirla y lo más habitual es notar cómo las encías sangran al cepillarte los dientes, comer algún alimento como una manzana o un pedazo de pan.
También son habituales para la gingivitis síntomas inflamatorios, notar un pequeño bulto en la encía que produce cierto dolor o molestias. Un cambio de color en todo el tejido gingival que da soporte al diente.
La gran mayoría de personas no desarrollan todos los síntomas. En ocasiones aparecen sólo algunas molestias y poco a poco aumentan hasta completarse un cuadro sintomatológico completo si no se combaten las causas. En otros individuos aparecen de golpe en la llamada gingivitis aguda. Así que como hay diferentes estados, vamos a describir los síntomas de la gingivitis:
- Sangrado de encías.
- Inflamación de algunos puntos de la encía. Puede aparecer hinchazón general.
- Mayor sensibilidad en los dientes, molestias y dolores.
- Yagas y úlceras bucales.
- Color de la mucosa bucal más oscuro e intenso, tirando a púrpura.
¿Cuáles son las causas?
Hay diferentes factores que pueden producir la aparición de la inflamación y sangrado de las encías. Algunas veces se da por una circunstancia y en otras hay un cúmulo de ellas que hacen que aparezca con mayor frecuencia.
La causa principal de la gingivitis es la placa dental. La acumulación del sarro y la flora dental poco a poco puede hacer crecer descontroladamente las bacterias sobre los dientes y, esto, introducirse en las encías y hacer que se inflamen.
Pero además, hay ciertos factores personales que pueden aumentar el riesgo y la probabilidad para que padezcas esta infección. Algunos puntos clave son:
- Cepillarse poco los dientes.
- Embarazo.
- Diabetes.
- Medicación con efectos secundarios.
- Estrés y épocas con aumento de la ansiedad.
- Enfermedades que debilitan todo el organismo.
- Fumar.
- Introducir objetos contaminados en la boca.
- Predisposición genética.
Algunos de los factores que muestran mayor riesgo son fáciles de controlar. Basta con cepillarse los dientes todos los días y usar hilo dental para evitar la acumulación de restos orgánicos entre los dientes, pero otras situaciones son más complicadas de resolver. No obstante, vamos a ver los remedios a los que puedes optar y así saber cómo curarla.
Tratamiento gingivitis
En general es bastante sencillo reducir la inflamación de las encías y eliminar la sangre. En la mayoría de los casos la solución principal para curar la gingivitis es realizar una limpieza de boca. Esta es realizada por el dentista en una sola consulta. Es muy rápida, efectiva y realmente es uno de los mejores tratamientos para la gingivitis. Debido a que con el paso de los mese se acumula la placa bacteriana en los dientes, el dentista puede limpiarlos de restos de nicotina, manchas de café y quitar toda la placa y sarro. Esto alivia casi siempre los síntomas inflamatorios y es la solución más utilizada.
Además, es importante que el odontólogo enseñe cómo curar la gingivitis y prevenirla. Así es posible frenar algunos casos de periodontitis y piorrea, o al menos retrasarlos en el tiempo. Pero vamos a detallar cada uno de los tratamientos de la gingivitis.
Limpieza dental
Es fundamental acudir al dentista cuando la inflamación de las encías continúa después de una semana. Si mediante el cepillado y el uso de algún tipo de colutorio sin alcohol no desaparecen los síntomas es posible que exista suciedad en los dientes, por lo que tu higienista dental puede eliminar la mayor parte de sarro con sus herramientas. Además puedes prevenir caries, mejorar el aliento y lucir unos dientes más blancos.
Gingivitis tratamiento antibiótico
En ciertos casos, aunque no hay placa bacteriana acoplada en las piezas dentales, o esta es muy pequeña el paciente acude al dentista porque le sangran las encías, hay un retroceso y tiene molestias generalizadas en la boca. En estos casos puede administrarse para la gingivitis tratamiento antibiótico específico. Este hará que la infección desaparezca y de nuevo sientas la boca fresca y sin dolor. Para los casos leves puede utilizarse algún tipo de espiramicina siempre recomendada por odontólogo.
El uso de los antibióticos siempre debe ser supervisado y bajo prescripción médica ya que pueden producir efectos secundarios.
Otros remedios y alternativas
Cuando existe una mala alineación de los dientes pueden favorecen una mala higiene bucal. En estos casos puede ser necesario utilizar un aparato ortodóncico para mejorar la alineación y evitar huecos en donde el sarro se acumula.
En los casos que se está utilizando un aparado dental, es posible que sea necesario sustituirlo por uno nuevo.
Además, en todos los casos está recomendado utilizar un colutorio bucal o enjugue de boca de vez en cuando. Este tipo de líquidos son antisépticos y mejoran la salud de los dientes. Pero hay que usarlos con moderación. También puede funcionarte bien si es leve:
- Enjuague gingival con ácido hialurónico, hexetidina o salicilato de metilo. Cada marca lleva un principio activo diferente para eliminar la placa bacteriana.
- Mezclar agua con una cucharada de sal y enjuagar sin tragar. Esto suele ser un remedio que funciona para evitar el sangrado de encías.
¿Puede provocar una gingivitis periodontitis?
Hay que recalcar que es importante eliminar la placa de los dientes. Cuando esta no es combatida puede llegar a dañar el tejido alrededor del diente y provocar la pérdida de una o varias piezas dentales.
En todos los casos no hay una aparición de periodontitis, pero hay que conocer los riesgos que supone no tratar la infección gingival. El periodonto es la estructura que da soporte y fija los dientes. Cuando es atacada por la placa bacteriana, poco a poco pierde sujeción, toma holgura separándose del diente afectado hasta producir, finalmente, la caída de la pieza dental.
La placa bacteriana puede dañar, además de las encías, el cemento radicular, el hueso alveolar, el ligamento periodontal. Esto hará que los dientes y muelas se muevan e incluso lleguen a caerse, no existiendo otra alternativa que hacer un implante.
Diferencias con flemones en la boca
Los flemones en la boca son también producidos por una infección bacteriana igual que sucede cuando aparece una gingivitis. El flemón se refiera a la inflamación o bulto que aparece en la encía, justo encima del diente o muela afectada. La infección gingival hace referencia a toda la afección bucodental, es decir, que con gingivitis puedes tener uno o varios flemones dentales o úlceras bucales pero no al revés. El flemón es el abultamiento por la infección y gingivitis es el nombre que recibe esa infección.
¿Cuánto tiempo dura el tratamiento?
Dependiendo del estado de la salud bucodental hay un plazo de tiempo que puede ir desde dos semanas a un mes aproximadamente. Si sólo necesitas una limpieza dental, a partir del día de la consulta en la que se realiza empezarás a notar mejoras y, en cuestión de unos días prácticamente habrá desaparecido la inflamación. Si necesitas otro tipo de remedios como son los antibióticos puede prolongarse unos días más. No obstante, es conveniente que lo hables con tu dentista de confianza para pueda darte información de primera mano en tu caso.